Se trata de un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo que presentamos como alternativa a la resección transuretral de próstata (RTUP).
La fotovaporización compite con esta técnica y la cirugía abierta al reducir el tiempo de intervención y el número de efectos secundarios. Puede aplicarse en pacientes con edades avanzadas.
El hecho de que evite el sangrado del paciente al producirse un sellado vascular en la zona, lo convierte un procedimiento adecuado para pacientes de alto riesgo quirúrgico o que tomen algún tratamiento anticoagulante.
Esta intervención reduce la estancia hospitalaria y el tiempo de recuperación.